No es
Noche de San Juan
y ha encendido una hoguera.
Es su cumpleaños y
cómo en un rito ancestral
con mucho mimo y cuidado
ha extendido
las ardientes brasas.
Al amor y el aroma
del sarmiento ardiente
y regadas con buen vino
las chuletitas asadas.
Imágenes y texto: María.
ZORIONAK!
ResponderEliminarEta... On egin!
Muxutxuak!
;)
¡Felicidades! Aún en mi boca, en el recuerdo de mi boca, la primera vez que comí chuletillas de cordero al rescoldo de sarmientos. Son distintas, únicas.
ResponderEliminarBesos
Que ricas. El olor de las chuletas a la brasa son un poema en si. Besos y gracias por tu amistad.
ResponderEliminar¡Qué ricas!
ResponderEliminarDicen que todos los santos tienen octava.
Felicidades, con un poco de retraso
Buenos fuegos se encienden en la noche.
ResponderEliminarMe gusta, también las costillitas asadas.
Un beso linda