CARTA DE DESPEDIDA

Querido amigo,

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Ahora que por fin nos conocemos, hemos de despedirnos.

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Quiero agradecerte este tiempo que he caminado contigo. Hemos tenido su poquito de cada cosa ... como todo buen guiso los días también necesitan su aliño. Contigo he aprendido muchas cosas, he descubierto nuevas facetas mías y de las personas que junto a ti me han acompañado.

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No te despido con pena y quiero que sepas que, bueno ó menos bueno, he disfrutado cada día de tu existencia que también ha sido un cachito de la mía.

Siempre te recordaré, mi querido y viejo amigo.

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Texto: María - Imagen pillada en la red.

RENACER

Barco varado.
Sangre y dolor
del viejo astillero.

Flor en la lluvia
de sol el resplandor
alma musical
curvas de mujer
de titanio la piel.

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Imagen y texto: María

EL ABRAZO

Cuentan que hace muchos muchos años, en aquel tiempo en que los campesinos arreaban su ganado a pié , los hortelanos labraban a base de azada y las fábricas estaban por inventar, vivía entre los moradores de este pueblo un niño grande. Y digo grande porque su tamaño era el doble de lo normal.
Tan grande llegó a ser que molestaba en el lugar, pues a su paso las casas temblaban, los niños lloraban de miedo y los lugareños, con gran pesar, acabaron rogándole que se fuera del pueblo.

El gigante, comprendiendo las razones de sus vecinos, se fue. Mas no se marchó lejos.

Vivió muchos años en un bosque cercano y sus vecinos notaban su presencia de diferentes formas.
· Ayudaba en la tala del bosque (las grandes ramas eran para él cual palillos).
· Con un simple dedo araba las huertas de sus vecinos.
· Construía presas.
· Modificaba ligeramente el cauce de algún río.

Los inviernos entonces eran duros y el gigante también ayudaba a sus vecinos.
· Cortaba leña y la almacenaba junto a cada casa.
· Protegía del hielo las cosechas con su aliento.
· Trasladaba el ganado con sus manos.

Pero llegó un invierno especialmente duro, con fuertes temporales de lluvia, nieve, granizo y mucho viento. El gigante, para proteger a su pueblo, se tumbó y lo resguardó de las inclemencias del tiempo colocándolo en el hueco formado por su cabeza hombros y brazos.

Desde entonces y como homenaje, cada día de año nuevo suben los lugareños al monte que rodea y protege su pueblo, brindan por aquel buen gigante y relatan a sus hijos este cuento.

Imagen y texto: María.

RECORDANDO

Temprano,
muy temprano te fuiste esta mañana.
Tan temprano
que las calles aun no estaban.

Temprano,
ligerito y cuesta abajo.
Caminito del tajo.

Tan temprano
que el búho ululaba
y los gorriones dormitaban.

Temprano,

tan ligero y presuroso.
Que hasta el hatillo
te olvidaste junto al pozo.

Tu azada,
tu boina bien calada
y el tabaco en la petaca.
Así cada mañana.

Contigo siempre va Lucero
(un burrillo plateado
y algo terco).
Ese a quién confías
tus pensamientos,
con quien compartes a diario
lo malo y lo bueno
y te sopla las briznas de tabaco
para que no fumes tanto.
Que te da calor en invierno

y sombra en verano.

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Esta es una estampa de antaño,
de esas que guardo
en un pequeño cajón de mi armario.
De las que ya no quedan
en nuestro mundo de ciencia,
tecnología, prisa y competencia.

¡Lo que darían hoy algunos
por tener por compañero a un burro!

Texto: María - Imagen pillada en la red

BUEN DÍA

Seis de la mañana. Todo a mi alrededor duerme y todavía no han puesto en su sitio las calles.
Es una delicia, porque a esa hora los moradores del castillo descansan, todo está en calma, el baño está libre y una puede hacer tranquilamente .... todo.

Tras apañar un poquillo el castillo y medio preparar la pitanza de mediodía, me preparo el desayuno, nada del otro mundo, pero como a mí me gusta. Mi zumito de naranja, mi tostada de pan atrasado -con su xorrito de aceite-, mi café con leche calentito –ays’ ... que quema-.


Bueno, como ya he oído por ahí al rey del castillo y algún principito .... voy a ventilar un poquillo los reales aposentos.

Y una está en su ... sacude alfombra, pasa el paño, haz la cama .... y viene la princesa y ... MAMMA QUE REGUAPPA QUE ERES, un beso que ya me voy. Toda emocionada la acompaño hasta la puerta y con dos besos sonoros le deseo un buen día y me dirijo hacia la cocina.

¡Ala! a desayun .... .. No se rían Uds. , que mardita la grassia. Mi desayuno se ha evaporado como por arte de magia y ahora toca café recalentao con galletas revenías.

Ea! a trabajar, que ya toca ...

LA LUCHA

¡Dame valor madre!
Me voy a la guerra ...
De mis laboriosas manos
me quieren quitar las lentejas.
Gente envidiosa, incapaz y necia.
¡No lo conseguirán!

¡Tranquila madre!
Hoy habrá pan en la mesa .

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Texto: María - Imágen pillada en la red

SOY 60% AGUA

Me gusta la lluvia,
me gusta pasear con ella y bajo ella.
Me gusta a goterones fuertes y recios,
y tambien la lluvia fina que penetra hasta los huesos.
Me gusta su aviso antes de comenzar,
el olor a tierra mojada, a fertilidad.
Me gustan los nubarrones gordos y grises
nubarrones preñados de rico alimento.
Y me gusta el arco iris
y sentir como sopla el viento.
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(º_*)
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Cual rana saltarina jugueteo con las mojadas hojas
es mi piel cual suave plexiglassss
¡hola hoja !
ranita salta y moja moja moja.

Texto: María - Imagen: pillada en la red.

LA REINA DE LA CASA

De ellos dicen que son orgullosos,
narcisistas,
muy suyos, que
¡ojito! cuando les das la espalda

Nada más lejos de la realidad!.
Son discretos,
tímidos,
cautelosos en su hacer
y en su amistad ...

Un tesoro de estos raros vive en mi hogar
-y digo vive, porque ella es la reina, y
nunca tendrá dueño ni dueña-.

Cuando estudio se acurruca cerca.
Si coso ó escribo
me observa desde su altillo .
La última guardia hace antes de dormir.
Es despertador de niños y mayores,
corre tras la escoba ....
De la ropa recién planchada
le gusta el tacto y su aroma.
Paseando el alfeizar de la ventana
al vecino saluda cada mañana.
Ofrece tanto, para luego pedir nada ....

Esa es mi Ania

Texto e imagen: María